Un repaso a 2022. Parte 2

Como viene siendo habitual en estas fechas, os ofrecemos una revisión de las principales novedades en el ámbito de la investigación básica, clínica, epidemiológica y social sobre el VIH y que hemos publicado en La Noticia del Día a lo largo de este año.

6. Nuevos tratamientos

El presente año 2022 no ha sido especialmente prolífico en lo relativo a nuevos tratamientos antirretrovirales. En todo caso, las noticias se han repartido principalmente entre la aprobación de lenacapavir (Sunlenca^®) y la vuelta a la investigación de islatravir tras una interrupción de los ensayos clínicos el pasado año.

Respecto a lenacapavir, el pasado mes de septiembre la Comisión Europea aprobó su comercialización para el tratamiento de la infección por VIH-1 multirresistente –en combinación con otro u otros antirretrovirales– en adultos con infección que se encuentren en un régimen de tratamiento antirretroviral fallido por causa de problemas de tolerabilidad, resistencias o aspectos relativos a la seguridad. Un estudio publicado tras su aprobación europea mostró la robustez del fármaco –de administración semestral- y concluyó que su eficacia no se vería afectada por edad, sexo, etnia o niveles de CD4 basales.

En lo relativo a islatravir, finalmente se reiniciaron sus ensayos clínicos a una dosis menor a la inicialmente estudiada (puesto que se concluyó que los descensos de linfocitos asociados a islatravir serían reversibles y dependerían de la dosis utilizada) y abandonando –por el momento-– el estudio del fármaco en el contexto de la profilaxis preexposición (PrEP) frente al VIH, que se encontraba en fase III de investigación en el momento de la interrupción.

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7. Profilaxis preexposición al VIH (PrEP)

Durante el presente año se han publicado diversas noticias relativas a la PrEP, principalmente relativas a su eficacia y seguridad.

Así, un estudio se centró en el impacto renal de la combinación tenofovir disoproxilo fumarato/emtricitabina (TDF/FTC, especialidad farmacéutica genérica [EFG], Truvada^®). Dicho impacto es bien conocido por su amplio uso dentro del tratamiento antirretroviral durante muchos años, aunque lo es menos en el contexto de la PrEP, hecho que llevó a la puesta en marcha del estudio. Los investigadores concluyeron que dichos efectos secundarios renales son muy poco frecuentes y que estos, en caso de aparecer, se podrían revertir cambiando de la pauta diaria a la pauta a demanda.

En términos de eficacia, un estudio evidenció que la PrEP podría estar evitando el 60% de los nuevos casos de VIH en Francia en hombres con un mayor riesgo de exposición.

Lo último destacable respecto a la PrEP ha sido que Europa ha dado un primer paso –concretamente validando la solicitud de comercialización- hacia la aprobación de cabotegravir inyectable como PrEP, una estrategia preventiva ya disponible en EE UU desde el año pasado y que sería una opción preventiva especialmente más efectiva que la PrEP oral en algunos colectivos vulnerables.

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8. Comorbilidades

En el contexto actual de envejecimiento progresivo de la población VIH positiva, las comorbilidades y su manejo son uno de los principales temas de investigación, con el objeto de mejorar la salud y la calidad de vida de las personas que las padecen.

En lo relativo a la salud cardiovascular en personas con el VIH, un estudio concluyó que casi la mitad de las personas con el VIH europeas se encontrarían en alto riesgo cardiovascular. El mismo estudio halló que una parte sustancial de estos pacientes no estaría tomando tratamientos antihipertensivos o hipolipemiantes.

Respecto a la salud mental, una investigación observó que las personas con el VIH presentaron una tasa de incidencia de diagnóstico de enfermedad mental superior en un 62% a la tasa registrada en las personas sin el VIH. Otro estudio halló que el deterioro cognitivo tendría un impacto muy significativo en la calidad de vida de las personas con el VIH.

Otro campo de investigación dentro de las comorbilidades es el hígado graso, más frecuente en personas con el VIH que en la población general. Un estudio publicado este año concluyó que el hígado graso aumentaría el riesgo de enfermedad cardiovascular en personas con el VIH.

Por último, los cánceres no definitorios de sida en personas con el VIH siguen siendo ampliamente estudiados dada su mayor incidencia que la observada en la población general. Un estudio se centró en el cáncer de pulmón –uno de los más prevalentes en nuestro entorno- y halló una elevada prevalencia de cáncer de pulmón en una cohorte española de personas con el VIH de mediana edad. Dichos resultados ponen de manifiesto la necesidad de programas de cribado específicamente dirigidos a estas personas.

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9. Efectos secundarios

Los efectos secundarios –a pesar de que los tratamientos antirretrovirales son cada vez más tolerables- siguen siendo una de las principales causas de consultas y preocupación en las personas con el VIH. Durante el presente año se han publicado diversos estudios al respecto.

Uno de ellos fue estudio español que halló que el inhibidor de la integrasa dolutegravir (Tivicay^®, también en Triumeq^®, Dovato^® y Juluca^®) inhibiría la producción de la sustancia adiponectina, lo que podría conllevar un aumento de peso, ya que el mismo fenómeno se observaría en algunas personas con obesidad. Dicho hallazgo podría explicar el aumento de peso observado en personas en tratamiento con inhibidores de la integrasa.

Otros dos estudios han hallado otros efectos secundarios asociados a inhibidores de la integrasa. El primero de ellos concluyó que el tratamiento con inhibidores de la integrasa se asociaría a un riesgo incrementado de padecer infarto de miocardio, apoplejía o una intervención para aliviar una patología cardíaca grave durante los primeros dos años de exposición a dicha familia de fármacos respecto al observado en quienes iniciaban tratamiento antirretroviral sin inhibidores de la integrasa. El segundo, por su parte, vinculó el uso de inhibidores de la integrasa a un mayor riesgo de padecer hipertensión arterial –algo que también se asociaría a los inhibidores de la proteasa.

Un último estudio sobre efectos secundarios –en este caso respecto a la posible prevención de su aparición- concluyó que los suplementos de vitamina D evitarían los efectos secundarios óseos de tenofovir disoproxilo fumarato.

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10. Mujeres y VIH

Las mujeres con el VIH son un grupo poblacional frecuentemente olvidado en los ensayos clínicos –especialmente en los países occidentales, donde los nuevos casos se dan sobre todo entre GBHSH-. No obstante, la investigación en este grupo poblacional –aunque menor de lo que sería deseable- se sigue llevando a cabo y desde este servicio de noticias tratamos de dar especial prioridad a su publicación.

En el contexto de las terapias hormonales anticonceptivas, un estudio ha concluido que las mujeres africanas prefieren el anillo vaginal a los comprimidos orales como PrEP frente al VIH. Dicho estudio refuerza la idea de que las jóvenes pueden tomar decisiones informadas cuando se les da a elegir entre distintas opciones de prevención del VIH y pueden utilizarlas de manera efectiva con el apoyo adecuado.

En el ámbito de la menopausia, un estudio halló que la terapia hormonal con estrógenos en mujeres postmenopáusicas con el VIH presentaría beneficios a nivel cardiovascular. En todo caso, los propios autores del estudio destacaron la necesidad de realizar un adecuado balance riesgo-beneficio antes de plantear el uso de dicha terapia por haber sido identificada como un factor de riesgo de cáncer de mama. Otro estudio relacionado detectó que el acceso a las terapias hormonales para el manejo de la menopausia sería insuficiente en mujeres con el VIH y que el agravio comparativo respecto a las mujeres seronegativas sería especialmente notable en mujeres negras con el VIH.

En lo relativo al uso de la PrEP en mujeres se publicaron a lo largo del año dos noticias, ambas tuvieron lugar en EE UU y ambas fueron negativas. La primera de ellas puso de manifiesto que la mayoría de mujeres que podrían beneficiarse de la PrEP en EE UU no la están recibiendo y detectó que tener bajos ingresos sería la variable social que más determinaría la continuidad de las mujeres en los programas de PrEP. La segunda fue la denegación de la aprobación del anillo vaginal con dapivirina en EEUU, una decisión que cercena las opciones de prevención en mujeres.

Respecto a los efectos secundarios, un estudio halló que el uso de tenofovir alafenamida (TAF, en Descovy^® y otras coformulaciones) e inhibidores de la integrasa se asociaría con un mayor aumento de peso en mujeres con el VIH embarazadas.

Durante este año también se evidenció un aumento de la preocupación en África por la criminalización de las mujeres con el VIH que dan el pecho a sus bebés. En ese sentido, diversos expertos abogan por la implementación de un enfoque basado en los derechos humanos y la evidencia científica para poner fin a los procesos penales contra las mujeres con el VIH que optan por la lactancia materna.

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