La mayoría de los pacientes con VIH responden igual de bien que los pacientes sin VIH tras una operación

Edwin J. Bernard

En general, los pacientes con VIH no responden peor que los pacientes sin VIH tras someterse a cirugía, según un estudio retrospectivo de 332 pares de casos emparejados realizado por un grupo de investigadores del norte de California (EE UU). El estudio, publicado en el número de diciembre de Archives of Surgery descubrió que la mayoría de los excesos de riesgo de infección (principalmente neumonía bacteriana) o muerte tras intervención quirúrgica estuvo relacionada con un recuento de células CD4 inferior a 50 células/mm3 o a una carga viral superior a 30.000 copias/mL, que aumentaron el riesgo de desarrollar complicaciones relacionadas con el post quirófano en cuatro y tres veces respectivamente.

Tanto antes como después de la llegada de la potente terapia antirretroviral, se realizaron estudios que examinaron los resultados de los pacientes con VIH sometidos a cirugía, arrojando resultados contradictorios. A pesar de informes recientes, por ejemplo respecto al éxito de la cirugía cardiaca en personas con VIH, se mantiene la creencia de que las personas con VIH por lo general responden peor tras una operación, en comparación con sus equivalentes sin VIH, y algunos cirujanos aún se muestran reticentes a practicar intervenciones a personas con VIH que por otro lado están sanas.

332 pares de casos emparejados

A fin de proporcionar mejores respuestas respecto al tema de los resultados quirúrgicos en personas con VIH, el doctor Michael Horberg y un grupo de colegas de la sede del norte de California del Programa Permanente de Cuidado Médico Kaiser, estudió 332 pacientes con VIH que se sometieron a una amplia variedad de intervenciones quirúrgicas entre 1997 y 2002.

Los autores compararon resultados con los de 332 pacientes sin VIH de la misma edad y sexo y que se habían sometido a una intervención similar aproximadamente en la misma época y en el mismo lugar que cada uno de los pacientes con VIH. Los pacientes con VIH (el 68% de los cuales estaba recibiendo terapia antirretroviral antes de la operación) habían estado viviendo con una infección por VIH diagnosticada a lo largo de una mediana de 8,4 años. La mediana del recuento de células CD4 en el momento de la operación fue de 379 células/mm3 y el 61,5% tenía una carga viral en plasma inferior a 500 copias/mL. Entre las intervenciones quirúrgicas estudiadas estuvieron: reparación de hernia (44% de todas las operaciones), extirpación del apéndice (17%), extirpación de la vesícula biliar (14%), injerto de cadera o rodilla (8%), bypass coronario u otra cirugía cardiaca (6%) y otras seis grandes intervenciones quirúrgicas. No hubo diferencias entre los casos y los controles (edad media: 46,7 años; 91% de hombres; 66% de raza caucásica), excepto en que hubo menos personas de origen asiático y más de origen afroamericano entre los pacientes con VIH.

La neumonía se observó con más frecuencia en pacientes con VIH

La única complicación observada con más frecuencia entre los pacientes con VIH fue la neumonía (2,4% frente a 0,3%; p = 0,02). Las ocho incidencias de neumonía bacteriana (y la única incidencia de neumonía bacteriana producida en un paciente sin VIH) se resolvieron con antibióticos. Sin embargo, otro paciente más con VIH desarrolló PCP y murió 43 días después de la intervención quirúrgica.

Más muertes tras un año, pero probablemente no relacionadas con la operación

Los pacientes con VIH fueron cinco veces más propensos a morir tras un año en comparación con sus equivalentes sin VIH (p=0,04) y la diferencia de riesgo absoluto de muerte a los doce meses fue del 2,4%.

Sin embargo, aunque los pacientes con VIH presentaron una tasa de mortalidad más alta (10/332 frente a 2/332) los autores consideraron que ninguna de las causas de muerte en las personas con VIH estuvo relacionada con su operación, sino más bien con otros aspectos de la infección por VIH, principalmente debidos a la inmunosupresión. "De los diez pacientes infectados por VIH que murieron en los doce primeros meses tras la operación", señalan los autores, "ocho tenían recuentos de células CD4 inferiores a 200 células/mm3, con una mediana de recuento de células CD4 de 101 células/mm3".

Aumento del riesgo: recuento de células CD4 <50 mm3, carga viral >30.000 copias/mL

Un recuento de células CD4 inferior a 50 células/mm3 estuvo relacionado de forma estadísticamente significativa con una tasa de complicación más alta que un recuento de células CD4 por encima de 50 células/mm3 (36,4% frente a 10,0%; p=0,006). Tras controlar por carga viral, sexo, uso de terapia anti-VIH,  factor de riesgo del VIH y origen étnico, esto aumentó el riesgo de sufrir complicaciones 4,34 veces (p=0,09).

Una carga viral superior a 30.000 copias/mL también estuvo relacionada con un aumento de las complicaciones en comparación con una carga viral inferior a 30.000 copias/mL. Tras controlar por recuento de células CD4, sexo, uso de TARGA, factor de riesgo de VIH y origen étnico, esto aumentó el riesgo de sufrir complicaciones 2,96 veces (p=0,07) . 

Sin embargo, un recuento de células CD4 inferior a 200 células/mm3 no estuvo relacionado con mayores tasas de complicación en comparación con recuentos de células CD4 superiores a 200 células/mm3 (13,3% frente a 10,3%; p=0,50) y el grupo de investigadores también descubrió que los pacientes con un historial de uso de TARGA dentro de los 180 días de la operación tuvieron una tasa de complicación similar a la de los pacientes sin historial de uso de TARGA (11,9% frente a 13,8%; p=0,69).

No se observaron otras diferencias

El grupo de investigadores señaló que a pesar de que "se había planteado la preocupación de que los pacientes con VIH tuvieran estancias hospitalarias más prolongadas y mayores seguimientos, afectando a los resultados… hemos descubierto cifras prácticamente idénticas de días de hospitalización y visitas de seguimiento quirúrgicas en pacientes con y sin VIH".
 
De hecho no se descubrieron diferencias estadísticamente significativas de retraso en la curación de heridas, infecciones en los lugares de operación, apertura de heridas, número de complicaciones, duración de estancia hospitalaria, número de visitas de seguimiento al cirujano o necesidad de posteriores intervenciones quirúrgicas para tratar complicaciones de la operación .

Fortalezas y limitaciones

Este estudio cuenta con importantes puntos fuertes que podrían hacer sus descubrimientos sólidos, incluyendo su tamaño, la amplia variedad de operaciones comunes representadas y el riguroso proceso de emparejamiento caso-control.

Sin embargo, existen varias limitaciones importantes. El grupo de investigadores no parece haber incluido a ninguna persona infectada o coinfectada por hepatitis C, y no parece que haya incluido a nadie con enfermedad pulmonar, hepática o renal preexistente, ni haber informado del status socioeconómico del paciente, factores todos ellos que podrían afectar potencialmente al resultado.

Puede haberse producido también un sesgo de selección entre los pacientes con VIH, ya que los pacientes más enfermos pueden haber sido menos propensos a someterse a cirugía (la mayoría de las operaciones fueron opcionales). También es probable que se hubiera sobredimensionado el número de complicaciones postoperatorias en los pacientes con VIH, ya que el hospital podría haber estado más predispuesto a admitir a estos pacientes antes que a personas sin VIH con infecciones similares (por ejemplo, en casos de neumonía bacteriana). 

Conclusión

El grupo de investigadores concluye señalando que "los pacientes con VIH están viviendo más tiempo y recuperando sustancialmente la función inmunológica. Muchos pacientes con VIH requerirán atención quirúrgica debido a diversas enfermedades. En muchos casos, el estado serológico al VIH no debería ser un criterio a la hora de determinar la necesidad de cirugía si los pacientes tienen unas características virales adecuadas.

Referencia: Horberg MA et al. Surgical outcomes in human immunodeficiency virus-infected patients in the era of highly active antiretroviral therapy. Arch Surg 141: 1238-1245, 2006.

Traducción: Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH (gTt)

Redes sociales

¿No quieres perderte nada?
Síguenos en todas las redes

Gilead
Janssen
MSD
ViiV
Gilead
Janssen
MSD
ViiV Healthcare
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Abbvie
Gilead
MSD