Más de la tercera parte de las pruebas de VIH realizadas en 2017 por la ONG Adhara-Sevilla Checkpoint son derivaciones del cibereducador en salud sexual que interviene en las aplicaciones de ‘dating’ y en otros espacios de internet
Un servicio de cibereducación en salud sexual a través de internet se muestra coste-efectivo y aceptable para hombres gais, bisexuales y otros hombres que practican sexo con hombres (HSH) que utilizan el entorno digital para la búsqueda de contactos sexuales. Esta es la principal conclusión a la que llega un análisis realizado por la ONG Adhara-Sevilla Checkpoint de los tres años de ejecución de su servicio de cibereducación en salud sexual. Los resultados fueron presentados a mediados de abril en la I Jornada Andaluza de Detección Precoz del VIH en Entornos Comunitarios.
Es bien sabido que internet ha supuesto una revolución en el modo de establecer relaciones y comunicarse. Muchas personas utilizan el medio digital para encontrar pareja, amistades y sexo. De hecho, el uso de internet para buscar parejas sexuales es una práctica muy extendida entre personas de todas las edades. Los hombres gais, bisexuales y otros hombres que practican sexo con otros hombres (HSH) se han beneficiado de forma particular de la privacidad que proporciona internet. De hecho, algunos estudios revelan que un 75% de los hombres gais, bisexuales y otros HSH en España utilizan internet para buscar parejas sexuales.
Por tanto, internet es también un espacio importante para la prevención del VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS). El objetivo de las intervenciones de outreach on-line es proporcionar una variedad de intervenciones en espacios virtuales frecuentados por hombres gais, bisexuales y otros HSH, como por ejemplo las aplicaciones para ‘dating’ o las salas de chat. Entre estas intervenciones se incluye el apoyo emocional, información sobre salud sexual y reducción de riesgos en las prácticas sexuales y la promoción de la prueba del VIH. La diferencia con otros programas y servicios es que no se espera a que la población en situación de riesgo acuda a los servicios y recursos existentes, sino que la intervención se proporciona in situ –allí donde está la población diana–, minimizando las barreras existentes que impiden, en muchos casos, a estas personas acudir a los servicios normalizados
En el año 2014, tres organizaciones comunitarias del ámbito del VIH en España –STOP SIDA, Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH y Creación Positiva– pusieron en marcha un proyecto de promoción de la salud sexual a través de internet desde y para el colectivo LGTB que cuenta con el apoyo de la Secretaría del Plan Nacional del Sida (PNS) del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Entre las actividades del proyecto, se incluye un curso de formación on-line de educadores de iguales en la promoción de salud sexual que tiene como objetivo que los participantes puedan adquirir conocimientos y habilidades para la intervención en una gran variedad de entornos digitales.
Tras participar en este curso de formación, Adhara-Sevilla Checkpoint puso en marcha en el año 2015 su propio servicio de cibereducación en salud sexual. El objetivo es ofrecer un servicio realista y fácilmente accesible en los espacios en los que se establecen o inician los contactos sexuales entre hombres gais, bisexuales y otros HSH, como por ejemplo salas de chat de portales web o aplicaciones para ‘dating’ (Wapo, Grindr, Scruff, Planetromeo, etc.).
El análisis de los datos de los tres primeros años de ejecución muestra cómo el servicio de cibereducación en salud sexual ha ido creciendo de forma remarcable hasta el punto de convertirse en una pieza clave dentro de los programas de la asociación: las intervenciones permiten al cibereducador dar a conocer a los usuarios otros servicios que ofrece la ONG y derivarlos en caso de que los necesiten.
Los resultados muestran que el número de consultas atendidas en 2017 fue de 1.712 lo que supone un incremento del alrededor de un 30% respecto a las consultas atendidas en 2015. La amplia mayoría de las consultas (n=929) fueron de personas que residen en Sevilla ciudad, aunque un 37% de las consultas procedieron de otras provincias andaluzas así como de otras comunidades autónomas.
Uno de los aspectos más valorados por el cibereducador y coordinador del servicio José Carlos Salcedo es el papel social que ejerce esta intervención en personas con el VIH, sobre todo en el ámbito rural, ya que abre una puerta al diálogo y facilita el conocimiento de recursos sociosanitarios que pueden mejorar su calidad de vida.
En cuanto a la edad, los usuarios del servicio son personas jóvenes. En 2017, el 60% de las personas que contactaron con el servicio de cibereducación tenían menos de 30 años. Se trata de una población de nativos digitales muy familiarizados con la cultura de las nuevas tecnologías.
Otro aspecto destacable del análisis de los datos de ejecución de Adhara-Sevilla Checkpoint es cómo la intervención de outreach on-line resulta eficaz a la hora de promover la prueba del VIH y derivar al servicio de la prueba de la propia asociación o a los servicios de la prueba del VIH de otras organizaciones en otras provincias andaluzas y el resto del país.
En 2017, un 36,5% del total de pruebas (n= 1.249) realizadas por Adhara-Sevilla Checkpoint se realizaron en personas derivadas por el cibereducador. Del total de resultados positivos a la prueba del VIH en Sevilla Checkpoint en 2017, un 33,3% (n= 10) se dieron en personas que habían sido derivadas por el cibereducador.
Además, la intervención permite aumentar el grado de aceptabilidad de la prueba del VIH en usuarios que nunca antes se habían realizado una prueba de detección. En este sentido, los resultados muestran que el porcentaje de personas que refirieron haberse realizado anteriormente una prueba del VIH aumentó de un 14% en 2016 a un 73,3% en 2017. Detrás de este aumento de la aceptabilidad, se halla el cibereducador que a través de su intervención basada en el counselling trata de reducir o eliminar el miedo a la prueba del VIH sobre todo en aquellos hombres que nunca se la han hecho.
En conclusión, el servicio de cibereducación es una intervención económica, coste-efectiva y ecológica que permite eliminar las barreras y desigualdades de acceso a la información, prevención y servicios socio-sanitarios y los obstáculos geográficos. El anonimato y la confidencialidad son la piedra angular de este servicio y son elementos que favorecen la comunicación usuario-cibereducador, sobre todo cuando los usuarios conocen que están siendo atendidos por un igual.
De acuerdo con José Carlos Salcedo, el cibereducador se ha convertido en un referente para muchos hombres gais, bisexuales y otros HSH que utilizan estos espacios para la búsqueda de contactos sexuales. Y añade: “Esto es debido básicamente a la disponibilidad y amplia presencia del servicio de cibereducación en estos espacios lo que ofrece la posibilidad a los usuarios de realizar consultas y recibir apoyo en cualquier momento por parte de un igual con formación específica”.
El servicio de cibereducación de Adhara-Sevilla Checkpoint es un ejemplo de buenas prácticas en programas de promoción de la salud sexual a través de internet. Su evaluación en profundidad, así como la de otros programas similares llevados a cabo por otras organizaciones, resultará fundamental para que estas intervenciones y enfoques puedan reproducirse e incluirse entre las políticas de salud pública que tratan de dar respuesta al VIH y las ITS en poblaciones clave.
Fuente: Elaboración propia (gTt-VIH)
Referencia: Salcedo Higueras JC. Intervenciones en entornos 2.0. El cibereducador: un igual muy cercano. I Jornada Andaluza de Detección Precoz del VIH en Entornos Comunitarios. Sevilla, 13 de abril de 2018.
