Buenos resultados de una prueba de detección del VHC en un solo paso en centros de reducción de daños en Cataluña

Francesc Martínez
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La intervención ha sido seleccionada por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías entre los mejores nuevos modelos de atención

Un artículo publicado en International Journal of Drug Policy ha mostrado los resultados finales del estudio HepCDetect II, que ha logrado desarrollar un modelo de cribado de la infección por el virus de la hepatitis C (VHC) activa altamente sensible y específico para ser llevado a cabo en centros de consumo supervisado de drogas intravenosas. Los primeros resultados fueron ya presentados tiempo atrás (véase La Noticia del Día 13/10/2017 ) y la presente actualización no ha hecho más que confirmar los buenos resultados del modelo de cribado. De hecho, el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías, una agencia perteneciente a la Unión Europea, lo ha seleccionado entre los 11 mejores nuevos modelos de atención europeos.

El protocolo habitual para las pruebas de cribado de la infección por el VHC incluye una primera prueba de anticuerpos (que permite detectar si la persona ha estado expuesta alguna vez al VHC) y, de resultar positiva, una segunda prueba que permita detectar ARN del VHC para así determinar si hay infección activa. Esta aproximación puede no obtener los resultados deseados en colectivos de difícil vinculación al sistema sanitario o con frecuentes pérdidas durante el seguimiento, como se observa frecuentemente entre usuarios de drogas intravenosas (UDI) en consumo activo.

Este hecho llevó a los autores del presente estudio a diseñar una prueba de cribado en un solo paso, que incluía una prueba rápida de anticuerpos del VHC, una muestra de sangre seca para comprobar la presencia de ARN vírico (infección activa) y –en el único de los centros incluidos en el estudio con disponibilidad de enfermeras– una tercera muestra con extracción de sangre para validar los resultados de las muestras de sangre seca.

Un total de 410 usuarios activos de drogas intravenosas (que se habían inyectado drogas al menos una vez en los últimos 6 meses) participaron en el estudio. Los participantes fueron incluidos entre mayo de 2016 y julio de 2017 en cuatro centros de reducción de daños del área metropolitana de Barcelona (Cataluña, España). El tamaño de la muestra se estimó para llegar a calcular la prevalencia de infección virémica por el VHC con un intervalo de confianza y una precisión adecuados.

Los centros de reducción de daños incluidos en el estudio proporcionan de forma rutinaria servicios de cribado del VHC (pruebas rápidas de anticuerpos) y del VIH (pruebas de cuarta generación de detección de anticuerpos y antígeno p24). La incorporación del presente método en estudio proporcionaría un resultado extra a la evaluación en un único paso (si la infección por el VHC se superó en el pasado o sigue activa). Ello permitiría una vinculación al sistema sanitario con el objetivo de tratar y curar aquellas infecciones activas por el VHC, lo que, a la luz de lo observado en un estudio australiano (véase La Noticia del Día 10/12/2018 ), podría suponer un importante paso hacia la consecución de los objetivos de la Organización Mundial de la Salud para el año 2030 con relación a las hepatitis víricas.

En la línea de lo ya publicado en 2017 en el análisis interino, los resultados mostraron que la presente estrategia presentó una sensibilidad (del 97,2%) y una especificidad (del 100%) muy elevadas. De hecho, la estrategia no mostró diferencias de capacidad de detección significativas con el protocolo habitual en dos pasos .

La prevalencia de anticuerpos frente al VHC entre los participantes fue muy elevada (del 79,8%) y la presencia de infección activa llegó al 58,5% . El 35,8% de quienes tenían infección activa no eran conscientes de que tenían la infección. Todos estos datos indican la elevada vulnerabilidad al VHC del colectivo incluido en el estudio, claramente una población clave sobre la que llevar a cabo programas para poder alcanzar el objetivo fijado por la OMS para el año 2030.

En su evaluación del estudio, el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías destacó que los centros participantes realizan rutinariamente importantes intervenciones de reducción de daños tales como facilitar el acceso a atención sanitaria gratuita a través de la tramitación de la tarjeta sanitaria a aquellas personas sin tarjeta sanitaria en vigor y acompañar a aquellos usuarios con infección activa por VHC con centros de atención primaria para la realización de la prueba de confirmación . También destacaron que en el marco del estudio los centros proporcionaron mucha información a los usuarios sobre la hepatitis C en el marco del estudio en sesiones formativas y posteriormente evaluaron la eficacia de estas intervenciones realizando cuestionarios a los usuarios .

Los resultados del presente estudio muestran que el protocolo de cribado de la hepatitis C evaluado es altamente sensible y específico y, por tanto, sería muy importante que su uso se extendiera a todos aquellos centros de reducción de daños con usuarios con perfiles similares. La elevada vulnerabilidad al VHC de los usuarios de drogas intravenosas hace que sea imprescindible implementar estrategias como la evaluada en el presente estudio para poder alcanzar el objetivo de la OMS para el año 2030 con relación a las hepatitis virales.

Fuente: Elaboración propia ( gTt-VIH ).
Referencia: Saludes V, Antuori A, Folch C, et al. Utility of a one-step screening and diagnosis strategy for viremic HCV infection among people who inject drugs in Catalonia. Int J Drug Policy. 2019 Dec;74:236-245. doi: 10.1016/j.drugpo.2019.10.012. Epub 2019 Nov 6.

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