La mayor parte de resultados clínicos a corto plazo de la atención al VIH en EE UU apenas se diferencian en función del tipo de médico que la ofrece. Sin embargo, resultados específicos tales como la retención en la atención y las pruebas de infecciones de transmisión sexual (ITS) registraron tasas más altas cuando las personas con el VIH acudieron a médicos no especialistas en ITS, personal de enfermería o una combinación de ambos que cuando fueron atendidas sólo por especialistas en ITS, quizá porque estos últimos centran más su atención en los biomarcadores del VIH y el tratamiento que en la coordinación de la atención. Estos son los principales hallazgos de un estudio estadounidense cuyos resultados se han publicado en la revista online Journal of Acquired Immune Deficiency Syndromes.
Un equipo de investigadores de la División de Prevención del VIH de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU (CDC, en sus siglas en inglés) en Atlanta y del Instituto de Virología Humana de la Facultad de Medicina de la Universidad de Maryland (EE UU) realizó un estudio en forma de encuesta transversal anual, que formaba parte del proyecto de monitorización médica de los CDC. En el estudio se evaluaron una serie de resultados clínicos del VIH en función del tipo de profesional sanitario en 6.323 personas que recibían atención del VIH entre 2019 y 2021.
Los participantes eran en su mayoría de mediana edad a mayores (27% de 45-54 años de edad, 40% ≥55 años de edad), de etnia negra (41%) y/o latinos (24%), hombres (75%), con seguro de médico público (53%).
En primer lugar, se evaluaron las características de los pacientes, los determinantes sociales de la salud y los resultados clínicos, que incluyen la retención en la atención en los últimos 12 meses, la prescripción de terapia antirretroviral en los últimos 12 meses, la adherencia al tratamiento antirretroviral en los últimos 30 días, la carga viral indetectable en los últimos 12 meses, las pruebas de ITS (gonorrea, clamidia y sífilis), la satisfacción con la atención del VIH recibida y la confianza en el especialista en VIH.
A continuación, se compararon los resultados de las personas con el VIH que acudieron tan sólo a médicos especialistas en ITS con los de aquellas que visitaron a otros profesionales sanitarios, ya sea únicamente médicos no especialistas en ITS, sólo personal de enfermería, sólo auxiliares médicos o una combinación de profesionales sanitarios que incluía a un médico especialista en enfermedades infecciosas.
En cuanto a los resultados, los pacientes atendidos por médicos no especialistas en ITS tenían más probabilidades de haber acudido a una clínica financiada por el Programa Ryan White de VIH/sida (programa federal que proporciona servicios de salud relacionados con el VIH para personas que no tienen suficiente cobertura médica o recursos financieros) y de presentar características y determinantes sociales de salud asociados con peores resultados del VIH en comparación con los pacientes que sólo acudieron a especialistas en ITS.
Tras tener en cuenta estas diferencias, los investigadores observaron que la mayor parte de los resultados no diferían significativamente en función del tipo de médico o profesional sanitario que ofrecía atención a los pacientes, excepto en lo que refiere a la retención en la atención y las pruebas recientes de ITS. Respecto a estos resultados específicos, un mayor número de pacientes atendidos por médicos no especialistas en ITS (+6,5 puntos porcentuales –pp–), personal de enfermería (+5,6 pp) o una combinación de ambos (+12,7 pp) fueron retenidos en la atención y se hicieron pruebas de ITS en los últimos 12 meses si eran sexualmente activos.
Entre las limitaciones del estudio se incluyen la dependencia de los registros del profesional de salud habitual de los participantes, la falta de información sobre consultas informales entre especialistas en ITS y especialistas en el VIH, la posibilidad de sesgo de información, la posibilidad de confusión residual, las tasas de respuesta subóptimas y el hecho de que algunos de los datos se recopilaron durante la pandemia COVID-19.
Los investigadores observaron que las diferencias en la retención en la atención y las pruebas de ITS podían deberse en parte a que los médicos especialistas se centran en los biomarcadores del VIH y los regímenes de medicación durante el tiempo limitado que pasan con los pacientes, en vez de fijar su atención en la coordinación de la atención, área que los médicos de atención primaria y otros profesionales sanitarios abordan de forma rutinaria.
Por otra parte, señalaron que, a diferencia de las personas atendidas por personal de enfermería, las que recibieron atención por parte de auxiliares médicos y las atendidas por especialistas en ITS obtuvieron resultados similares en términos de retención en la atención y pruebas de ITS. Apuntaron que probablemente el enfoque de la enfermería centrada en la persona en la atención que ofrece el personal de enfermería explicaría las diferencias, en comparación con el modelo de práctica médica de los auxiliares médicos.
Como conclusión, los investigadores recomendaron que los médicos especialistas en ITS presten una atención más integral y que se incluya a los médicos de atención primaria en las consultas de enfermedades infecciosas.
Referencia: TheBodyPro / Elaboración propia (gTt-VIH).
Fuente: Weiser, John MD, MPH; Tie, Yunfeng PhD; Crim, Stacy M MPH; Riedel, David J MD, MPH; Shouse, R Luke MD, MPH; Dasgupta, Sharoda PhD, MPH. Do HIV Care Outcomes Differ by Provider Type?. JAIDS Journal of Acquired Immune Deficiency Syndromes ():10.1097/QAI.0000000000003410, March 07, 2024. | DOI: 10.1097/QAI.0000000000003410
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