"Es muy posible que el VIH esté con nosotros en el futuro. Pero no tiene por qué estarlo también la enfermedad que éste provoca", dijo la Secretaria Clinton.
"Se trata de una meta ambiciosa y reconozco que no soy la primera persona que la plantea. Sin embargo, la creación de una generación libre de sida nunca había constituido una prioridad política para el gobierno de EE UU hasta hoy ", añadió.
"Este objetivo habría sido inimaginable hace apenas unos años. Sin embargo, ahora es posible gracias a los avances científicos financiados en gran parte por EE UU, así como a las nuevas prácticas aplicadas por esta administración y nuestros numerosos colaboradores de todo el mundo. Si bien la línea de meta todavía no está a la vista, somos conscientes de que podemos llegar, porque sabemos el camino que debemos tomar”.
Sus comentarios se producen después de meses de debate interno en el gobierno de EE UU acerca de cómo actuar a raíz de los resultados del estudio HPTN 052, que evidenció que el tratamiento antirretroviral de las personas con VIH reducía en un 96% el riesgo de transmisión del virus a sus parejas habituales.
"Si adoptamos una visión integral de nuestro enfoque de la pandemia, el tratamiento excluye la prevención", dijo. "Se complementan. Así que vamos a terminar con el viejo debate de ‘tratamiento frente a prevención’ y a adoptar el ‘tratamiento como prevención’".
Clinton destacó la importancia de tres medidas:
- Prevención de la transmisión de madre a hijo mediante el uso de fármacos antirretrovirales. Una de cada siete nuevas infecciones en todo el mundo se produce de madre a hijo; EE UU ha trabajado con otros socios internacionales como el ONUSIDA para desarrollar una estrategia para virtualmente eliminar nuevas infecciones infantiles para el año 2015, mediante la expansión de pruebas y tratamientos.
- La circuncisión voluntaria reduce en un 60% el riesgo de infección por VIH en hombres. PEPFAR ha financiado el 75% del millón de las circuncisiones realizadas en todo el mundo desde 2007 para prevenir el VIH.
- El tratamiento como prevención. El estudio HPTN 052 evidenció que el inicio temprano del tratamiento reduce en gran medida el riesgo de transmisión del VIH y otro estudio financiado por EE UU ha demostrado que el comienzo de la terapia antirretroviral antes de que aparezcan las graves enfermedades definidoras de sida o el estado de inmunodeficiencia, reduce de forma sustancial el riesgo de desarrollar sida o morir.
El anuncio fue bien recibido por los activistas.
"La secretaria Clinton ha presentado hoy una visión atrevida", dijo Matthew Kavanagh, Director de Promoción de Health GAP en EE UU. "Su discurso podría sentar los cimientos para que la administración de EE UU lleve al mundo a poner fin a la crisis del sida. También genera grandes expectativas entre las personas que lo escucharon: esperamos que el presidente Obama asuma ahora el liderazgo y aumente de forma drástica los objetivos del tratamiento antirretroviral proporcionado a través del PEPFAR, así como la ampliación de otras tecnologías de prevención de gran impacto".
Estamos observando que los gobiernos de varios de los países en los que trabajamos están dispuestos a aplicar los nuevos avances científicos para revertir el peaje que el virus se ha cobrado entre sus ciudadanos y sus comunidades. Si EE UU y otros países incrementan ahora su inversión en el tratamiento del VIH, sabemos que se salvarán millones de vidas y se evitará una cantidad aún mayor nuevas infecciones ", dijo el doctor Unni Karunakara, presidente internacional de Médecins Sans Frontières.
En su intervención, la Secretaria Clinton instó a que las naciones donantes hicieran más, incluyendo el apoyo y refuerzo del Fondo Mundial para la Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria. Los países socios también deben asumir más responsabilidades en sus programas nacionales contra el sida, incluyendo un mayor gasto en la lucha contra sus propias epidemias.
Pero las declaraciones de la Secretaria Clinton se dirigieron también a un público nacional que cada vez se muestra más reticente frente al gasto en ayuda exterior en un momento en el que EE UU está inmerso en amargos debates sobre cómo limitar el gasto público.
El candidato del partido Republicano para la nominación presidencial, Mitt Romney, ha cuestionado si EE UU debería estar gastando dinero para paliar la pobreza en el extranjero y, en el Congreso, dicho partido está tratando de recortar el gasto en salud mundial y de evitar cualquier aumento en las partidas económicas estadounidense destinadas al tratamiento del VIH.
"En un momento en el que las personas están planteando interrogantes sobre el papel de EE UU en el mundo, nuestro liderazgo en la salud mundial les recuerda quiénes somos y lo que hacemos", dijo Clinton.
Traducción: Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH (gTt).
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