En Khayelistsha, donde miles de personas están recibiendo antirretrovirales a través de clínicas del sector público, 41 trabajadores sanitarios huelguistas fueron despedidos, la mayoría de los cuales trabajaban en el mismo hospital. La Campaña de Acción por los Tratamientos (TAC, en sus siglas en inglés) afirmó ayer que estuvo debatiendo con los sindicatos modos de evitar la interrupción de los servicios crónicos y de urgencia. “Nos oponemos a cualquier interrupción de estos servicios”, afirmaron Zackie Achmat y Sipho Mthathi, presidente y secretario general respectivamente de TAC, en una carta dirigida al gobierno.
Los trabajadores sanitarios, por ley, no pueden realizar huelgas en Suráfrica. Trescientos ochenta trabajadores han sido despedidos en la provincia de Gauteng el martes por la noche, muchos de ellos pertenecían a personal auxiliar, tales como porteros, cocineros y limpiadores.
TAC condenó los despidos y afirmó que está buscando un interdicto de emergencia que evite los despidos en Cabo Occidental. Los líderes de TAC urgen al gobierno para que concluya las negociaciones salariales con los trabajadores del servicio público de modo que los servicios de cuidado sanitario puedan volver a la normalidad.
Los trabajadores del servicio público de Suráfrica están en huelga porque las ofertas de pago del gobierno apenas han mantenido el ritmo de la inflación a lo largo de varios ejercicios. El presidente Thabo Mbeki ha admitido que los trabajadores del sector sanitario tienen que estar mejor remunerados, pero los sindicatos han rechazado la última oferta del gobierno del 7,25%. La inflación en Suráfrica actualmente está en el 6,25%. Los líderes sindicales afirman que quieren un aumento del 10%.
El miércoles, COSATU, la federación de sindicatos surafricana, organizó una huelga nacional de solidaridad diseñada para paralizar el país. La huelga del servicio público empezó el 1 de junio.
Los médicos surafricanos del VIH han avisado a los pacientes de que algunas clínicas del VIH realizan servicios de farmacia de emergencia y los pacientes podrían obtener medicación mientras dura la huelga. También aconseja a los pacientes que lleven sus botes de pastillas vacíos a médicos o farmacias privados con la esperanza de que se los repongan.
“Entre las consecuencias de interrumpir la toma de fármacos antirretrovirales se incluye un deterioro inmunológico continuo, por lo que las personas con recuentos de CD4 bajos deberían hacer todo lo posible para reiniciar inmediatamente la terapia una vez las clínicas vuelvan a estar operativas”.
Traducción: Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH (gTt).
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