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José Muñoz-Moreno es psicólogo con formación en psicología clínica y de la salud. Actualmente trabaja en la Fundació de Lluita contra la SIDA del Hospital Universitari Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona), en la Unidad de VIH y también en l´Associació Catalana per al Parkinson. Atiende a las personas que se visitan en la unidad de VIH de su hospital y es responsable de varias líneas de investigación relacionadas con los cambios neurológicos, alteraciones de la personalidad y adhesión a los tratamientos antirretrovirales. También se dedica a la docencia colaborando con diferentes universidades catalanas.
LO+POSITIVO: ¿Cómo se define el deterioro neurocognitivo (DNC) asociado al VIH?
José Muñoz-Moreno: La definición más usada actualmente es la que considera el DNC como la interferencia en la actividad diaria de la persona, en relación con alguna área cognitiva o motora. Esto significa que las personas experimentan limitaciones en su vida diaria a causa de un empeoramiento en algunas de sus capacidades intelectuales y en algunos casos también motoras. Esto no ocurre en todas las personas ni evoluciona tampoco en todas de la misma forma.
En los casos más leves, las personas no tienen conciencia de un rendimiento menor. Sin embargo, cuando nosotr@s pasamos los test, sí observamos un empeoramiento en algunas capacidades. En estos casos hablamos de DNC asintomático.
Cuando además la persona tiene dificultades en su vida diaria a causa de un peor funcionamiento, hablamos de síndrome cognitivo motor menor. Finalmente, cuando el deterioro es muy grave, afecta a muchas de las capacidades de la persona y causa grandes limitaciones en la vida diaria nos referimos a demencia.

LMP: ¿Cuáles son los síntomas del DNC?
JMM: El DNC asociado al VIH afecta a 7 funciones cognitivas: la atención y la memoria a corto plazo (también llamada memoria de trabajo), la memoria a largo plazo, el aprendizaje, la velocidad en el procesamiento de la información, la función motora, la afluencia verbal y el funcionamiento ejecutivo (la capacidad de iniciación, planificación y de resolver tareas nuevas).
En lo cotidiano, la mayoría de las personas refieren dificultades para mantener la atención y para concentrarse, pérdida más o menos acusada de memoria, dificultades para la retención de nuevos datos, enlentecimiento mental, dificultades para encontrar las palabras con las que expresarse o para encadenar pensamientos y hacer razonamientos lógicos.
Es importante añadir que el DNC es un cuadro un tanto difuso y que a veces aparece muy enmascarado por otros factores psicológicos, físicos o situacionales, como podrían ser la depresión o el consumo de substancias tóxicas, o incluso las expectativas conductuales que presenta la persona. En la actualidad, es sumamente importante controlar todo este tipo de variables que también influyen en las personas con VIH.
LMP: ¿Cuáles son las causas del DNC asociado al VIH?
JMM: Hoy día sabemos que el VIH es una causa directa del DNC. De hecho, ésta es una de las pocas complicaciones de las que se sabe que está directamente relacionada con el VIH. Se ha demostrado que desde las primeras semanas de la infección el virus penetra en el SNC.
Algunos estudios hoy muy de moda, están haciendo mediciones de carga viral en el líquido cefalorraquídeo (LCR) y se está encontrando que los niveles son mucho más elevados que los encontrados en el plasma sanguíneo. Esto significa que el VIH mantiene una actividad mayor en el SNC, lo que posiblemente tiene como consecuencia el DNC.
LMP: ¿Tienen los fármacos antirretrovirales alguna relación con el DNC?
JMM: Sí, pueden tenerla, pero en un sentido positivo. Lo que ocurre es que el beneficio causado por los fármacos es mucho menor del esperado, debido a la escasa protección que ejercen sobre el SNC. Esto se debe a que los antirretrovirales no atraviesan bien la barrera hematoencefálica, algunos más y otros menos.
LMP: El DNC, ¿es reversible? Tras la recuperación inmunológica, ¿las personas pueden mejorar el rendimiento?
JMM: Existen dos hipótesis en relación a esto. Por un lado, se ha visto que las áreas cerebrales afectadas cuando una persona se encuentra muy comprometida inmunológicamente quedan dañadas permanentemente. Según la segunda hipótesis, una vez que los antirretrovirales consiguen frenar la replicación viral y el sistema inmunológico se recupera, la persona podría mejorar pero más lentamente y quizás sólo en parte. No se sabe aún si la afectación causada por el VIH en el cerebro es reversible y en qué medida lo es, no lo sabemos todavía.
LMP: ¿Algunas personas tienen una mayor predisposición que otras a desarrollar DNC?
JMM: Sí, y además hoy se conocen nuevos factores de riesgo para el desarrollo del DNC. En primer lugar, la edad, además del uso de drogas y la depresión. La escolarización también influye y las personas que no la han recibido se encuentran más expuestas al desarrollo del DNC. Por otro lado, existen factores genéticos por los que el SNC de algunas personas está más o menos protegido. Actualmente se está ampliando el número de factores de riesgo y el CD4 nadir es uno de ellos. En nuestro centro realizamos un estudio en el que hemos visto que las personas con un nadir más bajo tienen tendencia a presentar una mayor afectación neurocognitiva. De hecho, las recomendaciones actuales aconsejan iniciar lo más tempranamente posible el tratamiento, puesto que se trata de preservar al máximo el SNC, también es importante mantener el tratamiento el máximo tiempo posible y por el mismo motivo, se podrían desaconsejar en un futuro próximo las interrupciones de tratamiento.
La coinfección con hepatitis C es otro factor de riesgo importante para el desarrollo del DNC. La hepatitis C también afecta al SNC y en el caso de la coinfección con el VIH el daño se suma. El DNC en el caso de la coinfección VHC/VIH es un tema que cobra hoy mucha importancia y sobre el que hay mucho por investigar.
LMP: ¿Qué se puede hacer para paliar el DNC?
JMM: Por el momento, sólo los tratamientos para el VIH han mostrado tener un efecto beneficioso sobre el SNC, y aunque la protección es parcial e insuficiente, es lo que tenemos hoy.
Por otro lado, contamos con la rehabilitación cognitiva. En nuestro centro realizamos un estudio en el que tratamos de ver los efectos tras la aplicación de estos programas. Los resultados fueron más bien pobres y los cambios en l@s pacientes muy modestos. Por este motivo y porque los programas han de realizarse de forma bastante sistemática, la gente no se encuentra muy motivada.
LMP: ¿Hay algo que la gente pueda hacer en su casa para mejorar el rendimiento intelectual?
JMM: Es importante mantener el máximo de actividad cognitiva, se pueden hacer muchas cosas para ello: leer, calcular, hacer sudokus, pasatiempos, usar el ordenador. Algunos juegos de consola también estimulan la velocidad de procesamiento de la información, incluso ver la televisión puede ayudar.
LMP: ¿Existen fármacos para tratar el DNC?
JMM: No contamos aún con esos fármacos. Actualmente, se están investigando algunas substancias que en el futuro podrían servir para mejorar este problema, pero aún no existen resultados definitivos. Algunas estrategias de mejora probablemente se apliquen gracias a beneficios demostrados en otras patologías, y con fármacos o substancias naturales similares a las que usan en otras enfermedades o síndromes con sintomatología similar.
Referencias bibliográficas:
LO+POSITIVO: ¿Cómo se define el deterioro neurocognitivo (DNC) asociado al VIH?
José Muñoz-Moreno: La definición más usada actualmente es la que considera el DNC como la interferencia en la actividad diaria de la persona, en relación con alguna área cognitiva o motora. Esto significa que las personas experimentan limitaciones en su vida diaria a causa de un empeoramiento en algunas de sus capacidades intelectuales y en algunos casos también motoras. Esto no ocurre en todas las personas ni evoluciona tampoco en todas de la misma forma.
En los casos más leves, las personas no tienen conciencia de un rendimiento menor. Sin embargo, cuando nosotr@s pasamos los test, sí observamos un empeoramiento en algunas capacidades. En estos casos hablamos de DNC asintomático.
Cuando además la persona tiene dificultades en su vida diaria a causa de un peor funcionamiento, hablamos de síndrome cognitivo motor menor. Finalmente, cuando el deterioro es muy grave, afecta a muchas de las capacidades de la persona y causa grandes limitaciones en la vida diaria nos referimos a demencia.

LMP: ¿Cuáles son los síntomas del DNC?
JMM: El DNC asociado al VIH afecta a 7 funciones cognitivas: la atención y la memoria a corto plazo (también llamada memoria de trabajo), la memoria a largo plazo, el aprendizaje, la velocidad en el procesamiento de la información, la función motora, la afluencia verbal y el funcionamiento ejecutivo (la capacidad de iniciación, planificación y de resolver tareas nuevas).
En lo cotidiano, la mayoría de las personas refieren dificultades para mantener la atención y para concentrarse, pérdida más o menos acusada de memoria, dificultades para la retención de nuevos datos, enlentecimiento mental, dificultades para encontrar las palabras con las que expresarse o para encadenar pensamientos y hacer razonamientos lógicos.
Es importante añadir que el DNC es un cuadro un tanto difuso y que a veces aparece muy enmascarado por otros factores psicológicos, físicos o situacionales, como podrían ser la depresión o el consumo de substancias tóxicas, o incluso las expectativas conductuales que presenta la persona. En la actualidad, es sumamente importante controlar todo este tipo de variables que también influyen en las personas con VIH.
LMP: ¿Cuáles son las causas del DNC asociado al VIH?
JMM: Hoy día sabemos que el VIH es una causa directa del DNC. De hecho, ésta es una de las pocas complicaciones de las que se sabe que está directamente relacionada con el VIH. Se ha demostrado que desde las primeras semanas de la infección el virus penetra en el SNC.
Algunos estudios hoy muy de moda, están haciendo mediciones de carga viral en el líquido cefalorraquídeo (LCR) y se está encontrando que los niveles son mucho más elevados que los encontrados en el plasma sanguíneo. Esto significa que el VIH mantiene una actividad mayor en el SNC, lo que posiblemente tiene como consecuencia el DNC.
LMP: ¿Tienen los fármacos antirretrovirales alguna relación con el DNC?
JMM: Sí, pueden tenerla, pero en un sentido positivo. Lo que ocurre es que el beneficio causado por los fármacos es mucho menor del esperado, debido a la escasa protección que ejercen sobre el SNC. Esto se debe a que los antirretrovirales no atraviesan bien la barrera hematoencefálica, algunos más y otros menos.
LMP: El DNC, ¿es reversible? Tras la recuperación inmunológica, ¿las personas pueden mejorar el rendimiento?
JMM: Existen dos hipótesis en relación a esto. Por un lado, se ha visto que las áreas cerebrales afectadas cuando una persona se encuentra muy comprometida inmunológicamente quedan dañadas permanentemente. Según la segunda hipótesis, una vez que los antirretrovirales consiguen frenar la replicación viral y el sistema inmunológico se recupera, la persona podría mejorar pero más lentamente y quizás sólo en parte. No se sabe aún si la afectación causada por el VIH en el cerebro es reversible y en qué medida lo es, no lo sabemos todavía.
LMP: ¿Algunas personas tienen una mayor predisposición que otras a desarrollar DNC?
JMM: Sí, y además hoy se conocen nuevos factores de riesgo para el desarrollo del DNC. En primer lugar, la edad, además del uso de drogas y la depresión. La escolarización también influye y las personas que no la han recibido se encuentran más expuestas al desarrollo del DNC. Por otro lado, existen factores genéticos por los que el SNC de algunas personas está más o menos protegido. Actualmente se está ampliando el número de factores de riesgo y el CD4 nadir es uno de ellos. En nuestro centro realizamos un estudio en el que hemos visto que las personas con un nadir más bajo tienen tendencia a presentar una mayor afectación neurocognitiva. De hecho, las recomendaciones actuales aconsejan iniciar lo más tempranamente posible el tratamiento, puesto que se trata de preservar al máximo el SNC, también es importante mantener el tratamiento el máximo tiempo posible y por el mismo motivo, se podrían desaconsejar en un futuro próximo las interrupciones de tratamiento.
La coinfección con hepatitis C es otro factor de riesgo importante para el desarrollo del DNC. La hepatitis C también afecta al SNC y en el caso de la coinfección con el VIH el daño se suma. El DNC en el caso de la coinfección VHC/VIH es un tema que cobra hoy mucha importancia y sobre el que hay mucho por investigar.
LMP: ¿Qué se puede hacer para paliar el DNC?
JMM: Por el momento, sólo los tratamientos para el VIH han mostrado tener un efecto beneficioso sobre el SNC, y aunque la protección es parcial e insuficiente, es lo que tenemos hoy.
Por otro lado, contamos con la rehabilitación cognitiva. En nuestro centro realizamos un estudio en el que tratamos de ver los efectos tras la aplicación de estos programas. Los resultados fueron más bien pobres y los cambios en l@s pacientes muy modestos. Por este motivo y porque los programas han de realizarse de forma bastante sistemática, la gente no se encuentra muy motivada.
LMP: ¿Hay algo que la gente pueda hacer en su casa para mejorar el rendimiento intelectual?
JMM: Es importante mantener el máximo de actividad cognitiva, se pueden hacer muchas cosas para ello: leer, calcular, hacer sudokus, pasatiempos, usar el ordenador. Algunos juegos de consola también estimulan la velocidad de procesamiento de la información, incluso ver la televisión puede ayudar.
LMP: ¿Existen fármacos para tratar el DNC?
JMM: No contamos aún con esos fármacos. Actualmente, se están investigando algunas substancias que en el futuro podrían servir para mejorar este problema, pero aún no existen resultados definitivos. Algunas estrategias de mejora probablemente se apliquen gracias a beneficios demostrados en otras patologías, y con fármacos o substancias naturales similares a las que usan en otras enfermedades o síndromes con sintomatología similar.
Referencias bibliográficas:
- Muñoz-Moreno JA, et al. Benefits of a Cognitive Rehabilitation Program on Neurocognitive Impairment in HIV-Infected Patients. Preliminary Findings. Journal of the International Neuropsychological Society 2007, 13 (1), Supplement S1: 19.
- Muñoz-Moreno, JA et al. Differences in Neuropsychological Functioning between HIV+ and HIV+/HCV+ Infected Patients. The 3rd IAS Conference on Pathogenesis and Treatment, Rio de Janeiro, 24-27 July 2005, Abstract TuPe1.1C35.
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