DESDE el punto de vista emocional, no hay una forma “correcta” de responder ante el diagnóstico de seropositividad, y tampoco se trata de “trabajar” tus emociones y luego volver a tu vida de siempre como si nada hubiera pasado. Una vez que sabes que eres VIH+ ya no puedes volver atrás, a “no saber”, y para bien o para mal, tu vida será diferente a partir de ese momento. En realidad, adaptarse a vivir con VIH es un largo proceso que puede durar toda la vida. Por eso, durante el período inmediatamente posterior al diagnóstico es importante tener presentes algunas cosas que pueden servir de ayuda para iniciar ese proceso:
Diría que la regla de oro podría ser: concédete la importancia que te mereces, no sólo en cuanto a la atención médica/hospitalaria sino también en los asuntos más íntimos relacionados con el proceso de vivir, en este caso, de vivir con el VIH.