La promoción de la salud y la defensa de los derechos humanos de las personas con VIH –o en riesgo de adquirirlo– han sido la brújula que ha orientado el trabajo de Creación Positiva, la primera organización de VIH en España que introdujo de manera integral la perspectiva de género en sus proyectos y servicios. Su contribución a LO+POSITIVO ha sido fundamental en diversos artículos y reportajes, proporcionando la voz reivindicativa de una comunidad que ha reclamado desde sus inicios espacios y mecanismos de participación propios.
LO+POSITIVO ha sido un punto de encuentro, una ocasión para asomarse al mundo de las mujeres y hombres que vivimos con VIH. Ha permitido la visibilización de aquello que sucede en un espacio comunitario; ha estado al tanto de las investigaciones, de las reivindicaciones, de las políticas, al tiempo que ha tenido en cuenta las preocupaciones, las emociones, las ilusiones y las situaciones cotidianas que afectan a las mujeres y los hombres. Esta presencia ha contribuido al empoderamiento de las personas con VIH, es decir, ha posibilitado el desarrollo de estrategias mediante, entre otras herramientas, una información veraz y adecuada a las necesidades de la comunidad y al contacto con otras perspectivas, vivencias y experiencias en torno a lo que significa vivir con VIH.
LO+POSITIVO ha cuestionado, informado, formado y visibilizado las realidades del VIH en nuestra comunidad, así como la realidad de la prevención, de los tratamientos, de la vulneración de derechos y de la reivindicación de mejores condiciones de vida. Ha acompañado a nuestras usuarias y usuarios en sus procesos. Para algunos/as, su presencia ha permitido, desde la multidisciplinaridad, un cambio de rol, pasando de “pacientes” a sujetos activos en sus procesos de salud y enfermedad. Ha posibilitado que las personas con VIH sean conscientes de ellas mismas, de sus necesidades, sus carencias y sus derechos. Ha sido su mirada y su voz. Todo ello ha conformado un territorio para la promoción de la salud desde una concepción global e integradora, cuyo eje central ha sido la defensa de los derechos, elemento imprescindible para abordar el estigma y la discriminación que todavía padecen las personas que viven con VIH.
LO+POSITIVO, por otra parte, ha tenido un diseño esmerado, acorde con las noticias y reportajes elaborados; con unas páginas centrales llenas de humor e inteligencia; y separatas como las de ‘Mujer y VIH’, que fueron un referente informativo en un tiempo. En definitiva, la revista tuvo un estilo que nos habló y nos enfocó con consideración y nos hizo sentirnos importantes y cuidada/os.
Todo ello ha hecho de esta publicación un referente y un modelo de trabajo comunitario, de participación, de capacitación, de intercambio, tan necesarios en estos ‘malos tiempos para la lírica’.