El tratamiento con vareniclina para dejar de fumar resulta seguro y eficaz en personas con el VIH

Francesc Martínez
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Uno de cada cinco cánceres en personas con el VIH de EE UU se asociarían al tabaquismo

El uso de vareniclina (Champix®) para dejar de fumar sería seguro y eficaz en personas con el VIH, según ha concluido un estudio francés publicado en Lancet. Por su parte, un segundo estudio –publicado en AIDS– pone de relieve el impacto que tiene el consumo de tabaco sobre la salud de las personas con el VIH y destaca la necesidad de implementar estrategias que favorezcan la deshabituación tabáquica: uno de cada cinco cánceres en personas con el VIH de EE UU se relacionarían con el consumo de tabaco.

Desde su llegada a finales de la década de 1990, la terapia antirretroviral de gran actividad (TARGA), ha conllevado un aumento muy marcado de la esperanza de vida de las personas con el VIH que la acerca cada vez más a la de la población general (Véase La Noticia del Día 24/02/2016). Sin embargo, aún existen oportunidades de mejora de la esperanza de vida teniendo en cuenta los factores de riesgo modificables, entre los cuales el tabaquismo sería uno de los más destacados, ya que las personas con el VIH en tratamiento antirretroviral efectivo tendrían más posibilidades de padecer un cáncer de pulmón que de padecer sida (véase La Noticia del Día 27/09/2017).

Con el objeto de hallar estrategias eficaces para la deshabituación tabáquica en personas con el VIH, un equipo de investigadores francés diseñó un estudio para evaluar la eficacia y seguridad de vareniclina pare dejar de fumar en este grupo poblacional.

Los investigadores seleccionaron participantes con buena predisposición y motivación para dejar de fumar. El hecho de tener otras adicciones, padecer depresión o haber utilizado previamente vareniclina fueron criterios de exclusión del ensayo.

Los participantes tenían una mediana de edad de 45 años y eran mayoritariamente hombres (83%). Llevaban una mediana de 13 años viviendo con el VIH y el 94% de ellos tomaba TARGA (el 76% del total tenía carga viral indetectable). La mediana de años fumando era de 26 y el 82% manifestó haber intentado dejar de fumar al menos en una ocasión.

En el estudio se proporcionó vareniclina (en dosis incrementadas gradualmente para evitar las náuseas, efecto secundario conocido del fármaco) o placebo.

Durante el estudio todos los participantes (con vareniclina o placebo) participaron en hasta 15 sesiones de counselling presencial con profesionales debidamente formados. El estudio se estructuró en 3 fases:

  • Durante las primeras 12 semanas los participantes tomaron vareniclina o placebo y participaron en sesiones de counselling
  • En las siguientes 13 semanas ningún participante tomó vareniclina ni placebo y todos participaron en sesiones de counselling.
  • En la semana 26, quienes habían abandonado o no lograron dejar de fumar pudieron acogerse a un segundo intento con 12 semanas de vareniclina y participar en el seguimiento hasta la semana 48 de estudio

Finalmente, durante la primera fase del estudio, un total de 123 participantes recibieron vareniclina y 124, placebo.

Para confirmar si habían fumado o no, en las visitas de seguimiento de los participantes se midieron los niveles de monóxido de carbono en el aire exhalado.

En la semana 12 del estudio, el 29% de quienes tomaban vareniclina y el 11% de aquellos con placebo lograron dejar de fumar (p <0,005).

Al analizar los datos a la semana 48, el 15% de las personas que tomaron vareniclina y el 6% de quienes tomaban placebo habían dejado de fumar.

En el estudio participaron dos tipos de counsellors: expertos en deshabituación tabáquica y expertos en VIH con conocimientos sobre deshabituación tabáquica. El segundo tipo es el que logró mayor éxito (logró que el 20% de quienes tomaban vareniclina dejara de fumar, mientras que el otro tipo de counsellor solo lo logró en el 11% de los casos).

La mayor parte de los efectos adversos fueron leves o moderados y mayoritariamente de tipo gastrointestinal o neuropsiquiátrico (insomnio, dolor de cabeza, etc).

Globalmente, el 48% de quienes tomaron vareniclina y el 39% de aquellos con placebo experimentaron efectos adversos. El 7% de las personas con vareniclina y el 6% de aquellas con placebo experimentaron eventos adversos graves (diferencia no significativa).

El segundo de los estudios evaluó el impacto del tabaquismo sobre el cáncer en personas con el VIH de EEUU. Para ello, los investigadores incluyeron una muestra de 52.441 personas norteamericanas con el VIH que habían sido atendidas entre los años 2000 y 2015 y de la cuales se disponía de datos relativos al hábito tabáquico.

Los participantes sumaron 270.000 persona-años de seguimiento (una mediana de 3,8 años por participante). En el 4% de los participantes se detectaron nuevos casos de cáncer, lo que supuso una incidencia de 8,53 casos por cada 1.000 persona-años de seguimiento.

Las personas que desarrollaron cáncer presentaron una mayor tendencia a ser fumadoras (p <0,001).

Tras controlar diversos factores de confusión, fumar se asoció a un mayor riesgo de cáncer de cualquier tipo (cociente de riesgos instantáneos ajustado [aHR, en sus siglas en inglés]: 1,33; intervalo de confianza del 95% [IC95%]: 1,18-1,49) y a un riesgo de cánceres relacionados con el tabaco que duplicó al de aquellas personas con fumadoras (aHR: 2,31; IC95%: 1,80-2,98).

Dentro de los cánceres relacionados con el tabaco, en el que fumar conllevó un incremento de riesgo más importante fue el de pulmón (aHR: 17,80; IC95%: 5,60-53,63). Fumar también incrementó el riesgo de cáncer anal (aHR: 1,57; IC95%: 1,08-2,28).

A la luz de estos resultados, el tabaquismo sigue siendo una importante fuente de comorbilidades graves en personas con el VIH, por lo que implementar estrategias efectivas para la deshabituación constituye un objetivo muy importante. Vareniclina se revela como una opción segura y con cierta eficacia, aunque el apoyo de un buen terapeuta con experiencia tanto en la deshabituación como en el VIH parece esencial para el éxito de los programas de deshabituación tabáquica.

Fuente: CATIE / Aidsmap / Elaboración propia (gTt-VIH).
Referencias: Mercié P, Arsandaux J, Katlama C, et al. Efficacy and safety of varenicline for smoking cessation in people living with HIV in France (ANRS 144 Inter-ACTIV): a randomised controlled phase 3 clinical trial. Lancet HIV. 2018; in press.

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