AASLD: Altas tasas de curación de la hepatitis C en usuarios de drogas intravenosas ucranianos tratados con sofosbuvir

Francesc Martínez
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La mayoría de estas personas presentaba coinfección por el VIH

Un estudio realizado en Ucrania y presentado durante el 67 Encuentro Anual de la Asociación Americana para el Estudio de las Enfermedades Hepáticas (AASLD, en sus siglas en inglés), celebrado el mes pasado en la ciudad de Boston (EEUU), concluyó que las personas usuarias de drogas intravenosas obtendrían excelentes tasas de curación de la infección por el virus de la hepatitis C (VHC) tras seguir tratamientos basados en sofosbuvir (Sovaldi®, también en Harvoni® y Epclusa®). Las tasas de respuesta virológica sostenida a las 12 semanas de finalizar el tratamiento (RVS12, sinónimo de curación de la infección) serían del 93% y la mayoría de las personas tratadas presentaban coinfección por el VIH.

Desde abril de 2015, la organización ucraniana Alianza por la Salud Pública ha estado proporcionando tratamientos contra el VHC basados en sofosbuvir a personas en situación de vulnerabilidad dentro de uno de sus programas de atención. Hasta octubre de 2016, un total de 1.192 personas habían accedido al tratamiento a través de dicho programa, de las cuales el 80% eran usuarios de drogas intravenosas.

El análisis interino presentado en el congreso incluyó los resultados de 456 personas que habían iniciado el tratamiento entre julio de 2015 y abril de 2016.

La gran mayoría de los participantes (el 89%) estaban coinfectados por el VIH y el VHC y el 97% de estas personas coinfectadas se encontraban en tratamiento antirretroviral. El 14% de los participantes tenía experiencia en tratamientos del VHC (basados en interferón pegilado) y el 8% recibían terapia de sustitución con opioides. Alrededor de un 20% de las personas incluidas en el programa tenían historial de tuberculosis. La mediana de la edad era de 39 años y el 81% eran hombres.

Respecto al estadio de la infección por el VHC según la escala Metavir, el 11% de las personas incluidas se encontraban en estadio F1, el 11% en estadio F2, el 26% en estadio F3 y el 24% en estadio F4 (cirrosis hepática).

Casi la mitad de las personas tratadas (un total de 231) tenían genotipo 1 del VHC, treinta y cuatro tenían genotipo 2, 185 estaban infectadas por el genotipo 3 y seis por el genotipo 4.

El programa contó con un equipo multidisciplinar de asistencia, formado por profesionales sanitarios, trabajadores sociales y profesionales de organizaciones no gubernamentales.

La mayoría de los participantes (un total de 379) recibieron terapia formada por sofosbuvir, interferón pegilado y ribavirina durante 12 semanas.

La tasa de RVS12 global fue del 93% (del 94% al tener únicamente en cuenta los resultados de las personas tratadas con sofosbuvir, interferón pegilado y ribavirina).

Las seis personas con VHC de genotipo 4 obtuvieron RVS12, del mismo modo que el 97% de aquellas con genotipo 3, el 91% de las que tenían genotipo 1 y el 82% de las personas con genotipo 2.

Los resultados del presente estudio muestran que los tratamientos basados en antivirales de acción directa -incluso si solo se usa uno de estos fármacos combinado con interferón pegilado y ribavirina- logran elevadas tasas de curación en personas usuarias de drogas intravenosas, presenten o no coinfección por el VIH.

Estos resultados ponen en tela de juicio determinadas prácticas como la de denegar el tratamiento de la hepatitis C a usuarios activos de drogas intravenosas por temer una menor adherencia y –por ello- una menor efectividad del tratamiento. Posiblemente, una de las grandes responsables del éxito del tratamiento en el presente estudio sea la integración de un equipo multidisciplinar sociosanitario que, a buen seguro, habrá repercutido muy positivamente en la adherencia al tratamiento.

Dicho equipo multidisciplinar debería, una vez la persona obtiene la curación, ofrecer un apoyo continuado a estas personas ofreciendo terapias de deshabituación (si desean abandonar el consumo activo de drogas intravenosas) o la participación en programas de intercambio de jeringuillas y/o programas educativos para un uso más seguro de las drogas si no desean abandonarlas, con el objetivo de evitar la reinfección y mejorar la calidad y la esperanza de vida de estas personas.

Fuente: Aidsmap / Elaboración propia (gTt-VIH).
Referencia: Filippovych SA et al. Real-setting treatment data in people who inject drugs treated with sofosbuvir-based regimens in the Ukraine.  The 67th Meeting of the American Association for the Study of Liver Diseases: The Liver Meeting, poster presentation, Boston, 2016.

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